Que el enemigo no vista como tú

Cuando escuché esta frase de “Monchi” Verdejo, Director General Deportivo del Sevilla F.C. en su Masterclass “Los Pilares Básicos”, supe que iba a ser inspiración para un posteo. En este artículo pretendo comenzar a pensar sobre la cultura organizacional. ¿Todos los miembros de la organización están alineados para alcanzar el objetivo? ¿Nos sentimos parte del éxito colectivo? ¿Nos rodeamos de la gente que nos hace mejores?

Estas son algunas de las preguntas que dispara mi recomendación de hoy, la Masterclass número 2 de Monchi y el Sevilla F.C. que les dejo a continuación.

Enseñamos que la Misión, la Visión y los Valores son los cimientos de la cultura organizacional, pero ¿Sabemos qué significa?. Yo creo que no hasta que lo vivimos, hasta que lo sufrimos. Las organizaciones deportivas deben entender que la cultura no es teoría, sino el resultado de las acciones y decisiones que tomamos en el día a día . La cultura es la manifestación de lo que somos como organización.

Monchi nos dice que es fundamental alinear a la organización hacia el éxito deportivo y económico y nos deja la frase que da origen al artículo; “Que el enemigo no vista como tú”. En esta oración, podemos ver la importancia de esta cultura y entender que las rivalidades de la organización no sirven para nada más que para debilitarla.

El ambiente de trabajo debe ser planificado y comunicado correctamente. Todos los miembros de la organización tienen que conocer las “reglas de juego” y por sobretodo, hay que tener en cuenta que generar miedo a la equivocación promueve el miedo a la organización.

Como líderes debemos promover la toma de riesgos, proteger a nuestro equipo, fomentar sus iniciativas y la creatividad. El líder que está seguro de su trabajo se rodea de gente mejor, alienta la participación y genera una “rivalidad positiva” en la que ser mejores, llevará al éxito de la organización.

¿Tu organización crea espacios para escucharte?

¿Qué estás haciendo vos para generarlos?

No esperemos a que todo nos llegue, tenemos que ser partícipes del cambio.